Byonik se introdujo en el mercado antiaging gracias al empleo del láser frío, conocido también como láser atérmico.
Su mecanismo de acción se basa en combinar un nanogel, que está compuesto principalmente por un ácido hialurónico «optimizado» en el que se asegura una excelente calidad de la molécula.
Además, el NanoGel incorpora a su formulación el wakame, un alga parda rica en vitaminas del grupo A,C y B.
Este alga de origen japonés contiene concentraciones de minerales esenciales para el funcionamiento del organismo como el magnesio, potasio, calcio, fósforo y yodo.
Láser atérmico + Wakame + Hialurónico
Por esta misma razón, los resultados de Byonik son más duraderos (hasta unas 6 semanas) y se prolongan en el tiempo (menos sesiones requeridas).
Ahora bien, el láser byonik (que se presenta como un aparato médico-estético, tal como aparece en la foto) , que es un láser frío, permite que el ácido hialurónico llegue hasta capas más profundas de la piel donde puede actuar y absorberse. Por eso se emplea la combinación de ambos.
¿Qué resultados se esperan del método Byonik?
Visualmente, la persona obtiene un correcto alisado de las arrugas así como la eliminación de pequeños pliegues. Se consigue una mayor elasticidad y un tono uniforme.
Cabe decir esta técnica de láser frío es indolora y sus efectos son inmediatos.
Byonik puede usarse en pieles sensibles, hombre o mujeres y en diferentes partes del cuerpo como son cara, cuello y escote.
El método es efectivo también para reparar aquellos daños producidos por la exposición solar y que son causa del fotoenvejecimiento. Actúa de esta forma como un tratamiento preventivo.
La duración de la sesión de tratamiento se sitúa entre los 60 y 90 minutos, en función de las zonas que se deseen tratar y el precio por sesión oscila en un rango de 90 y 130 euros según el centro.
La máquina completa de Byonik se está vendiendo por internet a unos precios alrededor de los 6000 euros.
Más información en: www.byonik.net