La mamoplastia siempre ha sido el recurso por excelencia para aumentar el tamaño de los pechos, pero ello implica técnicas invasivas que a algunas mujeres no les interesa, es más, sienten un poco de miedo y respeto.
Si no estás decidida a pasar por el quirófano pero quieres aumentar una talla de sujetador puedes probar otros procedimientos que no necesitan quirófano.
El relleno con Macrolane de los laboratorios Q-Med puede ser tu solución. Se trata de un gel de ácido hialurónico aprobado por la UE capaz de restaurar el volumen perdido en determinadas zonas del cuerpo como los pechos o los glúteos. Puede rellenar, elevar y remodelar ambas partes.
Esta novedad en el remodelado del contorno corporal no es de origen animal y su forma de actuar es muy similar al conocido y seguro Restylane, líder en el relleno facial y que explicamos en artículos anteriores.
El gel de Macrolane es un más denso que Restylane ya que al dispersarse más lentamente hace que permanezca en el lugar de acción más tiempo.
Es un ácido hialurónico biotecnológico en el que la modificación ha sido mínima para que se parezca totalmente al ácido hialurónico natural.
Se aplica de forma uniforme a nivel subcutáneo con una aguja muy fina por lo que no requiere hospitalización, aunque si anestesia de tipo local.
Es un tratamiento que puede durar entre 30 y 90 minutos pero que tras su finalización, la paciente puede volver a su actividad normal.
Tras la inyección, cada pecho puede ganar de 50 a 100g de peso, siempre de forma natural y atendiendo a la propia fisonomia de la mujer.
También se puede usar para corregir irregularidades en la piel o equilibrar el tamaño o forma de los senos.
Su aplicación debe estar controlada por personal médico cualificado. Casi siempre el perfil de estas personas está relacionado con tratamientos quirúrgicos permanentes o experiencia en inyecciones endógenas dentro del campo de la medicina estética.
Tu misión será la de decidir que clínico o doctor es el apropiado para ti y cuáles son sus acreditaciones o experiencias anteriores.
Ahora bien, la diferencia con una operación de aumento de mamas radica en que el gel no es permanente y a partir del año o año y medio, se reabsorbe de forma natural y se pierde alrededor del 30-50% del material inyectado. Desaparece completamente a los 2 años.
Esto permite a la mujer poder realizar valoraciones sobre un aumento de pecho sin tener que arriesgarse a ir al quirófano, además que el relleno con Macrolane no impide diagnosticar tumores u otro problema en la zona mamaria y esto se valora muchísimo si miramos por nuestro futuro.
Además, si la mujer se queda embarazada, esto no impedirá que pueda dar de pecho al bebé.
El uso de Macrolane para el aumento de mamas supone un gran avance tecnológico en el campo estético ya que los resultados son inmediatos y no comporta apenas efectos secundarios, por lo que el riesgo para la paciente es mínimo (moratones, pequeño dolor) y, a veces, inexistente.
Eso sí, está contraindicado en aquellas personas que ya dispongan de un historial de alergias o rechazos al ácido hialurónico, así como mujeres que estén embarazadas o dando el pecho.
Los precios se encuentra en una línea de 1800-2500 euros por sesión (ambos pechos). Esto ya depende de la clínica que realice la intervención.
9.5.2012 – La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, ha recomendado dejar de utilizar el implante de relleno inyectable ‘Macrolane’, usado para aumentar el volumen mamario con fines estéticos, tras haberse comprobado que puede interferir en la exploración física y en la lectura de mamografías para la detección precoz del cáncer de mama.
Así se desprende de una alerta sanitaria emitida por este organismo tras conocer la decisión de su homónima francesa, la AFSSAPS, que ha confirmado los riesgos inherentes de la inyección de esta sustancia en la mama.
En concreto, y según los informes que la sociedades médicas relacionadas con su uso han remitido a Sanidad, estos rellenos pueden producir la formación de acúmulos debido a la fragmentación y encapsulación del producto, que interfieren en la exploración física mamaria y en la interpretación de las exploraciones complementarias como es el caso de las mamografías.
El producto es un gel de ácido hialurónico comercializado por la empresa sueca Q-Med AB, que ya ha anunciado el cese de la comercialización de este producto, al tiempo que va a informar a los profesionales sanitarios de no continuar con esta indicación.
Del mismo modo, la AEMPS también ha recomendado a los profesionales sanitario dejar de usar ‘Macrolane’ y realizar técnicas diagnósticas complementarias en la detección precoz del cáncer de mama en pacientes tratadas con éste o cualquier otro implante de relleno inyectable en la mama.
Comentario e información verificados.
Referencia: http://www.aemps.gob.es/informa/notasInformativas/productosSanitarios/seguridad/2012/08-2012_PS.htm
Gracias,
Pero al desaparecer el macrolane desaparece igual el volumen de lo aumentado?